Puebla Mochilera

San Mateo Ozolco celebra la 12ª Feria del Pulque en defensa de sus tradiciones

Pese a la falta de apoyo institucional, la comunidad nahua de San Mateo Ozolco se organiza para celebrar la duodécima edición de la Feria del Pulque. Con gastronomía, música y talleres, el evento reafirma la resistencia cultural y el anhelo de vivir el “sueño mexicano”.

Yussel Dardón

PUEBLA, MÉXICO.- Comunidad y resistencia son las palabras que acompañan a la duodécima Feria del Pulque en San Mateo Ozolco, tierra nahua entre volcanes que hace de la defensa de sus tradiciones una manera de hacerse presente y que este 1 y 2 de marzo celebrará su fiesta dedicada a Mayahuel, la diosa de los magueyes.

Pese a que claudicar cruzó por su mente debido a la falta de apoyo de las autoridades —que cada tres años se acercan a ellos para adueñarse del evento, queriendo utilizar a los habitantes únicamente como el “rostro” del festín—, los miembros de la comunidad cerraron filas para organizar una feria más, dedicada a la bebida ancestral. Una bebida que, como ellos dicen, “no emborracha, sino pone mágico”.

Este año, con el lema “El pulque es cultura”, Ozolco vuelve a abrir los caminos para recibir a sus visitantes, quienes podrán disfrutar de talleres, conferencias sobre el maguey y la lengua náhuatl, danzas prehispánicas y música de distintos géneros (ska, rock en náhuatl y más). También habrá gastronomía tradicional, como el mixmole (mole de pescado seco) y el ayonanácatl (hongo de chilacayote en tamal), además de diversos productos derivados del maguey.

EL SUEÑO MEXICANO

La feria es uno de los proyectos impulsados por los migrantes de retorno, como se nombra a quienes dejan Estados Unidos y el American dream para vivir el “sueño mexicano” en la tierra de sus madres, padres, abuelas y abuelos . A través de este evento, buscan fortalecer los proyectos comunitarios de Ozolco, como las tostadas de maíz azul, los helados de pinole, las artesanías de totomoxtle, granos, olotes y elote, así como los restaurantes que han posicionado la gastronomía de la región del Izta-Popo como una de las más relevantes y originales en Puebla.

El camino no ha sido fácil. A 15 años del primer festejo, la feria ha sido suspendida en dos ocasiones: primero por la pandemia de COVID-19 y después por agotamiento. Sin embargo, han sabido resistir y demostrar que San Mateo Ozolco no es sólo tierra de migrantes.

No, ya no más.

Así, la Feria del Pulque, sus proyectos comunitarios y el anhelo de vivir el “sueño mexicano” nos recuerdan que la defensa de las tradiciones, la lengua y el territorio son posturas de las cuales brotan ideas, cultura y libertad.

Mujeres y pulque, una relación histórica cobijada por Mayahuel

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