Entrevistas

Un food truck y un huerto en el parque Enrique Benítez

Luisa Rentería

PUEBLA, MÉXICO.- Acudir a esta camioneta de comida fue una experiencia que conjugo conocimiento y amabilidad por parte de los encargados de la misma: el papá, don Marco, y su hijo Jonathan Valencia, quienes en medio de la pandemia decidieron emprender con una food truck donde venden paninos estilo italiano, su sello, según comenta Jonathan Valencia, dueño de Il Mio Papino.

¿A qué te dedicabas anteriormente?

Soy chef y trabajé en algunos restaurantes.

¿Por qué decidiste emprender con esta food truck?

Decidí hacerlo por la necesidad de trabajar. Iniciamos este proyecto un poco tardado porque queríamos ofrecer un buen producto y que tuviera valor. Aunque hay muchas food trucks en Puebla y en esta zona, creemos que nuestro producto es innovador porque nuestro panino se acerca mucho al verdadero italiano.

¿De quién fue la idea de crear este camión de comida?

De ambos, de mi padre y mío. Mi papá también es chef y trabajamos mucho para comprar y ambientar esta camioneta.

El parque Enrique Benítez, sobre la 43 oriente en la colonia Huexotitla, lugar donde se encuentra Il Mío Panino, hace cinco años era un espacio descuidado, donde los indigentes y teporochos habitaban cómodamente.

Ahora, con la llegada de Jonathan Valencia y su papá, don Marco, junto con otros camiones de comida, han decidido darles vida a sus verdes espacios, aprovechando la tierra para crear un huerto local, donde sembraron aguacate, jitomate, cilantro, perejil, limón y otras frutas y plantas. Todas esto con el objetivo de rescatar el parque de Huexotitla, como se conoce entre los locatarios y vecinos. Gracias a esta iniciativa, más food trucks se han sumado para rescatar el parque y darle otra vista. Al mismo tiempo, le han dado vida con luces que han colocado entre los árboles para darle una mejor vista, así como bancas y mesas hechas a base de huacales que son compartidos entre todos los comerciantes.

¿Cómo nace la parte sustentable de tu negocio?

Lo que queremos es sacar de un mal estigma al comercio informal, y así mismo aportar algo a la sociedad, de ahí nace el huerto urbano, junto con otros camiones de comida que se han instalado aquí mismo.

La comida, su distribución y creación se han transformado y así seguirá en los años venideros. Cocinar y contribuir a un cambio climático y social debe ser parte de las nuevas generaciones de chefs y cocineros. Terminar esta entrevista con personas preocupadas por su entorno me dejo en claro que cada día son más los preocupados por buscar y aplicar la sustentabilidad su alrededor para el bien de la sociedad y de su familia.

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