“Alursita”, el sitio de una mujer apasionada por viajar y comer
Alejandra Alva es una mujer nómada que ha llevado su pasión a un estilo de vida
PUEBLA, MÉXICO.- Viajar, comer, explorar, beber, escribir, tomar fotos, aprender, enseñar, reseñar, recomendar, estudiar, y ahora, hacer todo eso, pero de la mano de su esposo y su bebe. Eso hace Alejandra Alva, mejor conocida como Alursita, una mujer nómada que ha llevado su pasión a un estilo de vida.
Alursita creció en Oaxaca, estudió Gastronomía en el Instituto Suizo de Gastronomía de Puebla (ISU) y Planeación turística en el Instituto Politécnico Nacional. Cuenta con un diplomado en Marketing digital por la Anáhuac con certificación en Google. Realizó un intercambio académico en la Universidad de Santiago de Compostela España. Ha trabajado en diferentes áreas del sector restaurantero como ventas de experiencia, organización de eventos y docencia. Desde hace más de cinco años se ha dedicado a la producción editorial especializada en restaurantes y actualmente está realizando una maestría en Marketing Digital en La Rioja España. Es creadora de Alursita, revista digital enfocada a la gastronomía y turismo, posicionada como una de las primeras revistas en aparición de búsqueda en Google.
Vayamos al origen de todo: tu gusto por la gastronomía. ¿Cómo sucedió?
Yo quería estudiar ingeniería en computación, me encanta todo lo relacionado a la computadora, pero pase de eso a estudiar gastronomía porque me gustaba mucho. Mi abuela cocinaba mucho, mi mamá al contrario no podía hacerlo todo el tiempo así que yo empecé a hacerlo. Yo me hice cargo de preparar la comida con ayuda de mi nana y comencé a explorar. De ahí fue que decidí estudiar gastronomía.
¿Por qué decidiste moverte a Puebla para estudiar la carrera?
Empecé a buscar muchas universidades para estudiar, lo intenté en varias escuelas, entre ellas en la Anáhuac, en Oaxaca, pero fuimos la primera generación y éramos como el experimento, así que no me gusto. Después viajé a México y empecé a estudiar en la UVM, pero tampoco me encanto, así que me fui al ISU, en Puebla. Yo llegué con el sueño de hacer mi propio restaurante y que no importaba trabajar 10 o 12 horas, trabajar en cumpleaños, navidad y nunca estar (risas) pero al final me pego la parte de que es más difícil como mujer trabajar en las cocinas.
Hubo acoso, me empezaban a decir que estaba bonita, y yo pensaba: no pasa nada, yo soy fuerte, pero sí me tope con ese shock”
¿Terminaste la carrera?
No. Estuve muchos años estudiando y trabajando pero al final las cosas se complicaron por cuestiones personales y familiares que ya no pude terminarla, pero sí trabajé aquí (Ciudad de México) en muchos lugares. Además, pasaron muchas cosas feas, en restaurantes buenos y demás, temas sobre el acoso, o que me corrieron porque no quise con el chef, y si era horrible. Estaba dispuesta a oler a cebolla pero no a esas cosas (risas). Por eso me salí y decidí estudiar planeación turística en el Politécnico.
¿Platicaban ese tipo de cosas entre compañeras del trabajo que estuvieran pasando por lo mismo?
Claro, había compañeras que incluso tenían que defenderse con cuchillo en mano. Había otras mucho más vulnerables que las manoseaban “de broma”. Por otro lado, entré a trabajar en el Pata Negra (bar de la Ciudad de México), y yo fui la más feliz, soy familia Pata Negra, lo amo y adoro, fueron seis meses increíbles de mi vida, y a diferencia de los restaurantes, trabajar en el bar no fue tan difícil en ese sentido.
¿Después siguió la carrera de Planeación Turística?
Sí, esa carrera sí la terminé (risas) y me mandaron a un intercambio a España por seis meses y fue una experiencia increíble, no cambiaria nada por volver a vivir Erasmus (programa académico de intercambio) y a “papá politécnico” que fue increíble para mí. Después de esos seis meses, cuando regresé a México, una amiga muy querida me preguntó si me gustaría trabajar en eventos, y le dije que sí. Eso fue hace nueve años.
¿Cómo nace Alursita?
Precisamente con la amiga que me invitó a hacer eventos, le dije que hiciéramos una revista con otros amigos gastrónomos, así que empezamos a hacer la planeación y lo más fácil era empezar en Twitter. La intención al inicio era publicar cosas más académicas, es decir, explicar los términos en un restaurante, por qué respetar los alimentos, y un poco más de filosofía. De Twitter me pasé a Instagram, pero no sabía nada de marketing ni de redes sociales, así que era más el estarle jugando. Yo solo sabía de turismo y de gastronomía (risas)
¿Hasta este punto ya habías viajado a otros lugares o solo a España por parte del intercambio?
No, ya había viajado. Cuando me fui a España ahorré mucho, comí fatal en los tiempos que tuve que comer fatal (risas) y me fui a Alemania, estuve recorriendo España bastante, me fui a París, a Marsella, Italia, Verona, Florencia, Holanda… fue casi un mes y medio que me la pasé viajando y además lo hice sola. Fue una experiencia fantástica. Conocí a mucha gente que todavía son amigos, este verano voy a ir a la boda de una de mis mejores amigas en Bélgica
¿Dirías que la facilidad de movimiento es mucho más accesible por las conexiones que hay entre países?
Sí, además de las distancias. Somos un país muy grande y si investigamos más, en realidad el mapa (de la República) no es proporcional, nos ponen más pequeños visualmente que lo que realmente somos. También creo que depende de cuáles son tus prioridades. Notros tenemos una televisión desde hace seis años y me vale. Yo prefiero viajar, comer, moverme. Mis prioridades han sido otras desde que me fui. Yo he vivido en Puebla, en la Ciudad de México, Oaxaca, Tabasco, Galicia y en Playa del Carmen. Soy Nómada. Después de eso, convencí a mi amiga de Bélgica a viajar de mochileras un mes por México.
¿Cómo viviste los contrastes de viajar en Europa y México?
Son lugares distintos pero yo siempre lo he dicho: México tiene todo. He estado en Tailandia, en Camboya y Vietnam; he estado en Perú y Estados Unidos. Es poco probable que encuentres la belleza que tiene México en otros lugares. Yo me casé en Santo Domingo de Guzmán (Oaxaca) y la comparas con iglesias en Alemania u otros lugares y dices: ¡Es una joya! Tenemos mucha arquitectura bonita, lo malo es que no la cuidamos, y también la inseguridad. Si México fuera seguro, seríamos potencia mundial en turismo.
¿Alursita qué es actualmente?
Muchas cosas. Una revista donde se hace reseña, y hay publicidad. También las publicaciones en redes sociales. Hago campañas de diferentes tipos: por parte del gobierno, por parte de marcas, restaurantes, ingredientes, utensilios de cocina…
¿Cuánto tiempo llevas dedicándote a esto de manera profesional?
Al inicio todo fue por hobby, pero de manera profesional tiene tres años.
¿Cuál fue la primera campaña que te pago o tu no tenias ni idea de que eso se cobraba?
Fue en España, me busco una agencia española que estaba trabajando en México para la marca de una mermelada y me llevo a España a conocer el producto y estuvo muy padre.
¿Qué viene en un futuro para Alursita?
Hice mi tesis de maestría sobre mi revista, así que llevar a cabo las estrategias, implementar lo que aprendí para buscar hacerla más grande.
¿Cuáles son los próximos destinos de viaje?
En marzo a Puerto Escondido; luego nos vamos a Estados Unidos y en verano a Europa.
¿Son viajes de trabajo o personales?
Hay uno que es mitad, mitad (risas)
¿Viajan los tres juntos (bebe, esposo y Ale)?
No, no siempre. En esta ocasión sí.
Si deseas seguir la vida de Alursita a través de sus viajes y comida, síguela en sus redes sociales como: Revista Gastronomía y Viajes, a través de Instagram; Revista gastronómica y de viajes Alursita, por Facebook, y a través de su revista: Alursita, Gastro y Travel Revista de gastronomía y viajes en México y el mundo Home – Alursita