La cultura del maguey en el estado de Hidalgo

MÉXICO.- No cabe duda que el maguey es uno de los productos agrícolas principales dentro de la cultura mexicana. Especialmente en el estado de Hidalgo, donde muchos de los elementos que dan identidad propia a sus habitantes se vinculan directamente con esta maravillosa planta.

El ámbito gastronómico es el más relevante, pues destacan alimentos tan exóticos como los gusanos de maguey, los que son larvas de las mariposas que anidan en las pencas y que deben extraerse preferentemente, antes de la temporada de lluvias, ya que, si se llegan a inundar, las larvas morirán y se desperdiciaría este delicioso manjar.

Existen dos variedades, los gusanos rojos, también conocidos como chinicuiles, y los gusanos blancos, los que son sumamente cotizados en el ámbito culinario y pueden llegar a costar hasta $1,500 el kg.

Se dice que una rica salsa con gusano de maguey es un manjar que se consume desde épocas prehispánicas, teniéndose la creencia que poseía poderosas cualidades afrodisíacas.

Continuando con el recorrido de esta ruta del maguey en el estado de Hidalgo, nos encontramos con una joya gastronómica: el ximbo.

También conocido como “envuelto de pollo”, se trata de una especie de mixiote originario de Actopan, en donde se eligen las mejores pencas de maguey para poder envolver la carne de pollo, mezclada con cueritos y chamorro de cerdo, previamente adobados con una deliciosa salsa, para después ser llevados a un horno de tierra para que se cocinen durante horas, hasta que la carne quede tan suave que se desprenda del hueso fácilmente.

Se dice que envolverlo en maguey es lo que le da el toque tan único y delicioso que lo caracteriza, volviéndose una parte fundamental de este icónico platillo.

Es importante no confundir al ximbo con la barbacoa hidalguense, pues, aunque su forma de preparación sea similar, las experiencias gastronómicas que aportan son muy diferentes, el sabor de la carne de res, cabra o borrego la hacen tener un sabor particular y muy característico.

Y en este importante recorrido no podía faltar el poderosísimo pulque, la bebida de los dioses, aquella con la que Tezcatlipoca embriagó a Quetzalcóatl, la bebida más emblemática de Hidalgo, aquella que nació del maguey y desde entonces se quedó de lleno en la vida de los mexicanos.

Con todo esto, es innegable el impacto que tiene la planta del maguey, no solo en el ámbito alimentario, sino también en el cultural, especialmente para los hidalguenses, quienes este 2023 se posicionaron como los principales productores de maguey a nivel nacional, con una producción de más de 2,013 toneladas, las que como ya vimos, son la materia prima de muchos productos identitarios de esta entidad. En tanto que, su producción de pulque, superó los 106,155 mdl (miles de litros), liderando por mucho la producción pulquera del país, dejando atrás a entidades como Tlaxcala y el Estado de México.

Te invitamos a seguir conociendo la riqueza cultural, gastronómica y agrícola de cada una de las entidades de nuestro país, teniendo en cuenta que entre más conozcamos de nuestro México y de nuestras raíces, podremos valorarlo, respetarlo y amarlo más.