MÉXICO.- La llegada del invierno está marcada por el solsticio que ocurre el 21 de diciembre. A estas fechas se le atribuyen muchas celebraciones sociales, mientras que en el entorno agrícola, su entrada tiene implicaciones muy importantes.
Esta temporada representa en la agricultura un momento de cuidados, pues en estas épocas la disminución de la temperatura es considerable, por lo que los cultivos pueden ver afectada su productividad, a causa principalmente de las heladas que son las que generan la mayor cantidad de superficie siniestrada en este periodo.
También es importante decir que la llegada del solsticio no implica que las temperaturas desciendan drásticamente de un día para otro, sino que desde los meses otoñales se va dando una reducción gradual de la temperatura. En el entendido entonces de que este es un proceso gradual y continuo, podemos ver como los agricultores trabajan para cuidar de sus cosechas con meses de anticipación.
Algunas de las principales medidas utilizadas para minimizar los riesgos de pérdidas por heladas es la malla sombra, pues esta funciona a manera de barrera física, impidiendo que los brotes de las plantas que están en plena etapa de desarrollo se vean afectadas. Si bien una de sus principales características es regular la cantidad de luz que obtienen los cultivos, la malla sombra también ayuda a adaptar la temperatura y la humedad en la que se mantienen los cultivos.
Aunque esta técnica de protección de cultivos no es tan sofisticada como la de los invernaderos, es también, una excelente opción para los agricultores, pues es de ayuda en gran parte del año.
Por otra parte, hay cultivos que no requieren de cuidados extra para poder desarrollarse en épocas invernales, pues sus características físicas les permiten adaptarse de la mejor manera a las eventualidades climáticas, entre los cuales podemos mencionar los siguientes: papa, camote, rábano, zanahoria, acelga, brocoli y coliflor.
Algunos otros cultivos, como la lechuga, también son resistentes a las bajas temperaturas, siempre y cuando hayan rebasado su primera fase de crecimiento, pues aunque son resistentes en etapas maduras, en su fase inicial siguen siendo susceptibles a las heladas y a los cambios drásticos de temperatura.
Conocer lo que nos ofrece el campo en cada temporada es de gran trascendencia, pues como consumidores de los productos agrícolas debemos ser conscientes del trabajo que representa el tener alimento en nuestras mesas, gracias al trabajo arduo de los agricultores mexicanos.