Comida después de Día de Muertos
Otra de las tradiciones y costumbres al finalizar la temporada de Día de Muertos y hacer el levantamiento de la ofrenda, es consumir los alimentos que se colocaron en ella. Muchas familias colocan fruta, agua, bebidas alcohólicas, pan dulce, tamales, moles y en general, los platillos favoritos de sus familiares y/o amigos.
Hay familias que acostumbran a cocinar muchas cosas, adornar gustosamente la ofrenda y colocar muchos elementos gastronómicos, ya sean dulces o salados. En muchas ocasiones, esos alimentos se van consumiendo poco a poco por los mismos familiares, siempre pidiendo permiso al difundo(s) antes de tomar la fruta o comida, como gesto de respeto y también con el fin de que la comida no se eche a perder.
Uno de los actos que nacieron de comer los alimentos de la ofrenda, es cuando sumergimos o remojamos el pan duro en el café o chocolate, comúnmente llamado ‘chopear’, adjetivo que nació de la voz popular, o también denominado ‘sopear’, aunque esta última se refiere más a utilizar la tortilla como cuchara, según la Academia Mexicana de la Lengua: “comer usando un pedazo de tortilla de maíz como cuchara”, calificativo importante de analizar en las costumbres mexicanas. El acto de ‘chopear’, nació después de que al hacer el levantamiento de la ofrenda, para no tirar el pan duro, lo remojaban en algo caliente para que se suavizara y se pudiera consumir.
También las frutas se utilizan para hacer atoles, tés o simplemente consumirlas tal cual estén, todo depende de su estado de frescura y sabor.
