Chile norteño bañado en nogada, reinterpretación culinaria que busca un lugar en ¿A qué sabe la patria?

MÉXICO.- “Para el sabor y el amor al terruño no hay distancia que valga”, afirma con nostalgia, pero también con alegría, Mercedes Macuitl Ramírez, una poblana que con más de una década radicando en Chihuahua encontró en la cocina tradicional un refugio de vuelta a su tierra natal, así como la pasión por compartir con otros paladares el sabor particular de las comidas de Puebla.

En Macuilli, cocina fundada por Meche -como se le conoce de manera amable-, el reto de generar nuevas comensalidades la llevó a reinterpretar una receta de la barroca gastronomía poblana para darle un toque regional, al presentar el chile norteño para el concurso ¡A qué sabe la patria 2024!

“Es un orgullo, un homenaje, un gusto. El chile norteño es una reinterpretación del chile en nogada creado a partir de las frutas que nos ofrece este territorio desértico y su similitud con las frutas tradicionales del platillo poblano”, dice al contar lo que para ella significa participar con esta receta.

Chihuahua es un estado productor de frutas de gran calidad como la manzana de Ciudad Cuauhtémoc, el durazno de Nuevo Casas Grandes, además de ser productor de nuez pecana en las regiones de Delicias, Aldama, Camargo, Meoqui, etcétera. En menor cantidad, comienza a cultivarse granada como un fruto que se adapta a las condiciones áridas del territorio. El estado es conocido además por la calidad en su producción ganadera, resultando en carnes de alto nivel. Estas fueron las condiciones materiales que le permitieron reinterpretar el platillo conventual poblano.

“Ser una persona de centro-sur en el norte de México no es sencillo. Creo, los poblanos que vivimos en Chihuahua capital podemos aprender a soportar el clima extremo de calor-frío, podemos acostumbrarnos a las distancias, aprender amar los burritos, pero siempre extrañamos la comida, esos sabores y variedades que nos ofrece nuestra gastronomía poblana”, narra con el recuerdo de los sabores en su paladar y en su memoria.

En Chihuahua, Meche aprendió a valorar la tradición familiar y el resguardo culinario.

Mi abuela Marcelina Blandina, una indígena tlaxcalteca, sembró en mí su amor por la cocina que vino a florecer en el norte.”

Los recuerdos de la comida surgieron poco a poco, cuenta Meche, quien dice que los 17 años en “el desierto” provocaron una búsqueda identitaria que ha resultado en la recreación y reinterpretación de platillos tradicionales poblanos en Chihuahua capital.

Estas recreaciones, nos acercan a esos sabores que tanto nos representan, dándonos confort al paladar, a la memoria.”

Desde Macuili, Meche presentó el Chile norteño norteño bañado en nogada al concurso ¡A qué sabe la patria 2024!, un platillo que nació de las similitudes y de las diferencias entre ambas gastronomías: su origen es poblano pero su ser es norteño.

Se exclama que el chile en nogada sólo es original y tradicional si se cocina en Puebla, con las frutas cosechadas en la región”, dice. Sin embargo, afirma que “estas declaraciones nos excluyen a quienes por una u otra razón no vivimos en Puebla, pero que seguimos abrazados a nuestra tradición gastronómica, que preparamos los chiles con los recursos más similares e inmediatos”.

Desde Macuili, Meche dice que la generosidad de Chihuahua le permitió reinterpretar una receta de origen poblano con identidad norteña, donde “la tradición no es menor, por el contrario, es un aliento de mantener vivo el fogón”.

Macuilli, cocina de tradiciones culinarias y “nuevas comensalides”

EL APUNTE

El concurso tiene entre sus objetivos fortalecer la salvaguardia de la cultura alimentaria y la biodiversidad del territorio mexicano, reconociendo y visibilizando los saberes, prácticas y tradiciones de las culturas indígenas, afromexicanas y populares, así como promover la transmisión de saberes familiares, conocimientos y valores alimenticios a las nuevas generaciones.