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Comida de feria

En la antigüedad, las ferias existieron bajo propósitos económicos, principalmente

Luisa Rentería

Las ferias son eventos sociales, culturales y económicos que se establecen por tiempo determinado en diferentes zonas para cubrir un propósito común: promoción cultural, turística, religiosa, industrial, empresarial, etc.

En la antigüedad, las ferias existieron bajo propósitos económicos, principalmente, en donde se plantaba el comercio que no estaba al alcance de todos en esa época, es decir, sus fines eran acercar a las regiones los diferentes servicios y productos que no podían (o existían) adquirir regularmente y, su florecimiento se dio en la Baja Edad Media o finales de la Edad Media, aunque las ferias ya existían desde antes, principalmente gracias a los griegos, romanos y árabes.

Antojitos mexicanos, alimentos de herencia prehispánica

Con los años, los motivos principales fueron adecuándose a las diferentes sociedades y necesidades, pero algo que no cambio, fue la venta y adquisición de alimentos especializados en dichos eventos. La comida de estos eventos se identifica por ofrecer alimentos que todas las clases sociales puedan adquirir. Antiguamente, la comida estaba dividida: aquella que podía ser adquirida por las clases sociales más bajas y medias, y aquellas que era exclusiva para los altos mandos.

Actualmente, aunque eso no es una regla estricta, lo cierto es que se puede encontrar comida de todo tipo ─según la región─ y precio. Los alimentos que se ofrecen en las ferias suelen ser, por ejemplo, en México, comida de antojería: sopes, gorditas, elotes, esquites, frutas con dulce, camotes, etc.

En Puebla, la comida típica de las ferias se centra en los mismo: comida de antojerías: chalupas, cemitas, pambazos, molotes, elotes, esquites, tamales, insectos de temporada con chile y limón, chicharrones preparados; y también hay los extranjeros: hot dogs, hamburguesas, pizzas, banderillas, nachos, palomitas…

La dinámica de las ferias ─además de ofrecer otros servicios y productos que no sean alimentos─ es ir probando diferentes alimentos al mismo tiempo que se explora. Comer parados, sentados o caminando en medio de cientos de puestos de comida: oler la carne asada mientras te comes un pambazo o tomar un agua de sabor y al otro segundo cambiar por un agua mineral con chile y limón, o las famosas “rusas” que de rusas no tienen nada. Al final, toda esa experiencia que deriva de las ferias es folklor.

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