Cuatro destinos mexicanos ideales para el turismo gastronómico
MÉXICO.- La gastronomía mexicana es una de las más reconocidas a nivel mundial, gracias a su variedad en ingredientes y sabores, y de acuerdo con la Organización Mundial de Turismo (OMT) un turista cuando viaja destina 30% de su presupuesto en alimentos.
Aquí tienes cuatro destinos ideales para practicar el Turismo Gastronómico en México.
Veracruz se distingue por tener una de las gastronomías más ricas de México. Desde las tradicionales picadas, que son una variación de sopes y se pueden pedir de tres maneras, verdes (con salsa de tomate), rojas (salsa de jitomate) y cafés (salsa de chiles secos) con queso, crema y cebolla picada.
Además, su cercanía al mar también le da la posibilidad de ofrecer una variedad de platillos marinos como cazuela de mariscos, pescado a la veracruzana (bañado en salsa de jitomate, con pimiento y aceitunas) y el legendario “Vuelve a la vida”, un coctel con camarón, jaiba, ostión y otros mariscos.
Lo anterior se puede acompañar con un torito, bebida hecha con mantequilla de cacahuate, leche, hielo y vodka o aguardiente de caña, ideal para refrescarse.
Mientras que en Oaxaca, el mole negro, rojo, almendrado, amarillo, entre otros, son típicos de la región; además de las tlayudas, una tortilla dorada, acompañada de tasajo, lechuga, quesillo y salsa; tamales de chepil, elaborados con masa de maíz, manteca de cerdo, caldo de res o pollo y hojas de Chepil.
Ello, sin olvidar los característicos chapulines de Oaxaca, lo cual puede ser complementado con un mezcal y de postre un buñuelo con café de olla.
A su vez, en Hidalgo se encuentra el tradicional paste, una herencia británica que se adoptó para alimentar a mineros y contenía papa y picadillo de carne, en la actualidad hay de diversos sabores salados y dulces.
Otra delicia es la barbacoa, la cual se consume en tacos y no es más que una preparación prehispánica del borrego, la cual consiste en envolver al animal en hojas de maguey puesto al fuego en un horno bajo tierra.
Los alimentos pueden ser acompañados con un pulque, bebida resultado de la fermentación del jugo del maguey y que puede saborearse con su sabor natural o como curado (de diversos sabores como piñón, piña, nuez, entre otros).
En Yucatán, el estándar es la cochinita pibil, la cual consta de carne de cerdo adobada con achiote, preparada con hojas de plátano y que se preparaba en un horno de tierra, también ofrece panuchos (tortilla frita, rellena de frijoles).
Así como papadzules (enchiladas servidas con salsa de pepita verde y epazote, rellenas de huevo cocido) y que vienen precedidas de una sopa de lima, la cual es complementada con cebolla, cilantro y aguacate. Como bebida, está el Xtabentún, un licor local que se fermenta a partir de una flor del mismo nombre y que puede ser tomado solo o acompañado de miel o en café.