Dalias, flores de colores para adornar… ¡y hasta comer!
- Esta flor, declarada símbolo de la floricultura nacional en 1963, se parece a la jícama
MÉXICO.- ¡Viva México! ¡Y sus dalias! Este símbolo de la floricultura nacional es perfecto no sólo para adornar nuestros hogares, sino también para ser degustado durante estas Fiestas Patrias.
Más allá de la conocida flor de calabaza, existen en México pétalos y tallos que perfectamente pueden ser el centro de guisos, ensaladas o antojitos. La dalia, conocida también como Acocoxóchitl, es una de estas flores. Su bulbo, tallos y pétalos, nos explica a LA CAMPIÑA la antropóloga Lorena Estrada, pueden comerse cocinados o crudos.
“El bulbo se puede tomar crudo o cocido, lo puedes agregar a una ensalada, por ejemplo”, ilustra. “El bulbo, cocido junto con las flores, puedes triturarlo y mezclarlo con papas a modo de puré, o bien puedes hacer un guisado con flores de calabaza y pétalos de dalia o una sopa de quelites, quintoniles, verdolagas, calabazas tiernas y bulbos de Dalia”.
Aunque la debes probar para hacerte una mejor idea, desde LA CAMPIÑA te adelantamos que esta flor, declarada símbolo de la floricultura nacional en 1963, se parece a la jícama. Por eso se utiliza el término Jicamaxóchitl para referirse a ella.
“Es muy fibrosa y tiene demasiada agua. Para alguien que no la ha probado sabe demasiado a jícama y en algunas variedades, de acuerdo a los colores de los tallos -algunos son más oscuros, tienen betas rojas o de algunos otros colores- tiene un cierto sabor ajengibrado”, relata Estrada. “Es una especie de jícama con cierto jengibre”.
La Dalia florece entre abril y mayo pero durante el otoño y el invierno es posible encontrar sus bulbos. “El bulbo sigue vivo, se seca completita la planta pero el bulbo está creciendo”, asegura Fernando Chiapa, especialista de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM). “En diciembre y enero no tienen nada de flor, parece que están muertos, aunque se puede comer en ese momento”.
Eso sí, no se te ocurra comprar Dalias en la floristería de la esquina para comértelas después ya quedebes asegurarte de que no lleven ninguna sustancia química. ”Tienen que ser Dalias orgánicas porque si no, pueden tener venenos químicos que pueden incluso matar a alguien”, advierte la antropóloga.