Dark Kitchens vs Cocina en Casa
Según Michael Shaefer, director global de alimentos y bebidas de Euromonitor International, “las dark kitchens, ghost kitchens o cocina fantasma, son instalaciones de cocción que producen alimentos solo para la entrega a domicilio sin áreas de comedor o de áreas frente al cliente, esto puede ser operado por un restaurante individual o por terceros”. Por otro lado, están los restaurantes virtuales, negocios que no están abiertos al público y operan exclusivamente para las plataformas de delivery, es decir, entregas a domicilio.
Los conceptos de dark kitchen o ghost kitchens nacieron en 2015 en Inglaterra, esto a consecuencia de los altos costos que los locales en las grandes ciudades de Europa tenían, lo que significaba que cada vez fuera más difícil mantener un restaurante, además de los problemas que conllevaba encontrar un local en buenas ubicaciones, “fue entonces cuando diferentes emprendedores comenzaron a buscar espacios como sótanos o lugares pequeños en donde los comensales no tienen acceso y comenzaron a vender a través de plataformas digitales”, señala Vicente Cruz MacGregor, emprendedor de las dark kitchens.
Esta forma de trabajo bajo los conceptos anteriores llego a México en 2019 y en 2020 a causa de la contingencia sanitaria provocada por COVID-19, se popularizo abriendo oportunidades de negocio así como ayudando a que muchos restaurantes no cerraran sus puertas debido a la poca demanda de consumo en sus locales. En muchas ocasiones, los actores involucrados cocinan desde casa, ambientan su hogar para la creación de productos take away o delivery, utilizando diferentes aplicaciones de entrega a domicilio y herramientas de marketing digital para entregar sus productos.
Por otro lado, están las amas de casa o personas que deciden cocinar desde su hogar exclusivamente para llevar. Normalmente preparan “comida corrida”, alimentos que regularmente se suelen consumir en el hogar o solían, ya que cada vez son menos las veces que estos alimentos se preparan debido a la facilidad de pedir comida para llevar. Estas provisiones se venden como “comida por litro o medio litro”, donde podemos encontrar desde milanesas de pollo con ensalada, sopa de fideos, arroz, frijoles, papás con rajas, pasta roja o con crema, albóndigas y bisteces encebollados, por mencionar algunos. Estos alimentos son preparados en la cocina de las amas de casa y en la actualidad ese ejercicio continúa en muchas familias y funge como el principal proveedor económico de quienes lo ejercen. Este acto de cocinar en un espacio ambientado únicamente para llevar no esta alejado de lo que ahora se conoce como las dark kitchens.
Las amas de casa que cocinan en su hogar, mayormente se limitan a vender comida por las tardes, evitando los desayunos y almuerzos, pues ello conlleva trabajo de más y en muchas ocasiones ellas son las que realizan todo el trabajo, desde ir al mercado a comprar los suministros, llegar a casa y preparar todo, atender a los clientes que llegan, quienes en varias ocasiones principalmente son los vecinos de sus edificios o colonias, hasta levantar y limpiar todo para el siguiente día.
SÍGUE A MARIA LUISA RENTERÍA EN TWITTER: @MaraLuisaRente1
REFERENCIAS