Yolin Corhe, fotógrafa de paisajes rurales, cocinas tradicionales y la vida de un México auténtico
MÉXICO.- Los paisajes rurales de México, cocineras tradicionales y sus cosechas, fiestas, rituales y todo aquello que rodea a la cultura alimentaria es a donde apunta la lente de la fotoperiodista mexicana Yolin Corhe, quien avanza desde la mirada del indígena, el campesino y un México que muchas veces no se voltea a ver.
En el marco del Día Mundial de la Fotografía, que se celebra cada 19 de agosto, mostramos el trabajo de la fotógrafa radicada en Tlaxcala, dedicada a visibilizar, la labor del campesino y los pueblos indígenas.
Con cámara en mano, ha recorrido gran extensión del territorio mexicano para retratar la diversidad de expresiones culturales que se rigen en torno a la alimentación en México.
“No quiero mostrar protesta o decir ‘Mira, pobrecitos, lo que yo muestro es dignificar su imagen y su trabajo. Dignificarlos y con ello dignificarme”, relató en entrevista con LA CAMPIÑA.
Desde La Guelaguetza alternativa y las mujeres productoras de pulque de Santa María Apazco, en Oaxaca; la fiesta ritual de las palomitas de maíz que celebra el pueblo Mazahua en honor al Padre Jesús; o la tradicional Carrera de la Tortilla en Tehuacán, Puebla, forman parte de su acervo fotográfico.
“Me inclino muchísimo a los indígenas, a los campesinos, a estas personas que son muy sabias, muy ricas en cultura y que muestran un México que no conocemos otras personas. Eso es lo que yo hago”.
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Se suma un gran número de productores tlaxcaltecas, pues consciente de que sin las personas que trabajan el campo los mercados y mesas estarían vacíos, para Yolín es importante mostrar el sistema agrario, los agricultores y las cocineras tradicionales que con su labor mantienen el rescate de muchos ingredientes y recetas.
Yolin Corhe también ha inmortalizado los saberes de los antepasados como sus usos y costumbres en el campo, conocimientos culinarios o rituales medicinales resguardados por las generaciones más viejas y que hoy son de poco o nulo interés para los jóvenes:
“La importancia de retratar estos temas radica en que cada vez son menos las personas jóvenes que se quieren dedicar a esta actividad, son los mayores los que están haciendo el esfuerzo y quizá no encuentren en quién depositar sus saberes”.
Destaca en el trabajo de Corhe el corto documental Entre semillas y espinas, en el cual retrata el “invisibles y poco valorado” trabajo de las mujeres en el campo y el quehacer de Flavia, una campesina que sale de la adversidad al refugiarse en sus tierras sembrando nopales y maíz.
Pero el valor estético de las fotografías van más allá de la admiración, pues con su página Tlaxcala desde el Corazón, busca generar un catálogo por medio de la cual los productores puedan ser conocidos de manera directa sin intermediarios.
En los últimos meses, la fotógrafa documentó a las mujeres lacandonas, sus traspatios con especies comestibles y sus milpas, un proyecto bajo la línea de investigación de la Universidad Estatal de Nueva York; y trabaja en un guion sobre las abuelas cocineras de San Juan Ixtenco, Tlaxcala.
La virtuosa de la lente señaló que a futuro quiere seguir trabajando en panoramas del campo, mostrar, visibilizar y hacer un puente entre los campesinos e indígenas y la gente que no los conoce:
“A futuro quiero, si la vida me permite, seguir con mi cámara en el campo, en la fiesta ritual, en la casa del campesino, en la mesa del compañero indígena, en medio de toda la riqueza cultural de mi México lindo y querido”.
