Ozolco celebra con pulque y música a las faldas del “Popo”
PUEBLA, MÉXICO.- San Mateo Ozolco, el pueblo donde los magueyes se nutren de la ceniza del volcán Popocatépetl para ofrecer la savia que nace en su corazón, prepara su Séptima Feria del Pulque como una ofrenda para conservar sus tradiciones, cultivos, gastronomía endémica, su lengua materna y la música que suma todos los rostros de su identidad.
El próximo 18 de marzo, el pueblo pretende ofrecer más de tres mil litros de pulque y aguamiel a sus visitantes, con “curados” (pulque con fruta) de frutas y semillas dulces que amplían una gama infinita de sabores, comentan los organizadores del evento.
El colectivo Yolotequitl, que en lengua náhuatl significa “trabajando con el corazón”, inició la Feria del Pulque en la población de San Mateo Ozolco, perteneciente al municipio de Calpan, hace siete años con el fin de consumar un rescate biocultural de un pueblo que tradicionalmente es migrante.
Los jóvenes se fueron a Estados Unidos y abandonaron el campo, su lengua y sus raíces. Sólo algunos volvieron por la nostalgia de la riqueza de una tierra custodiada por los volcanes Popocatépetl e Iztaccíhuatl, y quienes lo hicieron tomaron la decisión de reconstruirse a partir de una idea sólida: rescatar y fortalecer su identidad.
La Feria del Pulque tiene reglas en armonía con la biodiversidad y sus costumbres; por ejemplo, todas las familias que participan en la feria siembran un mínimo de diez magueyes pulqueros en sus tierras o linderos, con el propósito de preservar este cultivo.
Además, buscan servir el pulque y aguamiel en jícaras (recipientes naturales) o de barro. La comida también se ofrece en hojas de milpa, con el fin de evitar hasta lo posible los productos de unicel.
Fernando Hernández, miembro organizador de la Feria, asegura que a pesar de que cada año son más los visitantes a su tierra, los productores hacen todo lo posible por apegarse a los lineamientos de conservar su pueblo limpio. También han coincidido en no vender otra bebida con alcohol como la cerveza, porque la idea es mostrar el contexto cultural del pulque.
EL MEJOR PULQUE DE MÉXICO
“Si no te gusta el pulque, atrévete a probar el de Ozolco y entonces decides”, dice Alberto Rincón, también organizador de la Feria. La diferencia con el pulque de otras regiones, creen los lugareños, se debe a que los cultivos de maguey en este pueblo se fertilizan y nutren con las cenizas del volcán Popocatépetl, abuelo de sus habitantes.
“Cada movimiento del abuelo es muy importante para nosotros. Cuando arroja ceniza, aparentemente perjudica a todos, pero a nosotros nos beneficia mucho en el cultivo: nutre la tierra”, remarca Alejandro Rincón.
Quizá por eso el pulque no es viscoso, mantiene un sabor fresco y una consistencia agradable, ideal para beberlo solo o mezclarlo con otras frutas como el higo, el “curado” más exitoso de la última feria que recibió a casi 5 mil personas, comenta Fernando Hernández.
Visitar la Séptima Feria del Pulque en San Mateo Ozolco es más que una visita de cortesía a un pueblo donde sus jóvenes buscan conservar su identidad. Es, además, actuar en congruencia con un pueblo organizado que se siente orgulloso de ser un pedacito de México
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