Papa, alimento con historia y cultura
MÉXICO.- Todo comienza hace 8,000 años, en la cordillera de los Andes, América del Sur, en la frontera de Bolivia y Perú.
En 1532 la invasión española puso fin a la civilización inca, pero no a la papa, pues el cultivo de los tubérculos sigue siendo la actividad más importante de la temporada agrícola cerca del lago Titicaca, donde la “Mamá Jatha”, aún se considera la semilla de la sociedad andina.
Con la devastadora Guerra de los 30 años que asoló Europa, la papa comienza a cultivarse masivamente en todo el continente para mitigar los efectos de la hambruna, y se dice que grandes ejércitos, como el de Napoleón, subsistieron gracias al sustento que la papa aportaba.
La papa es una buena fuente de calorías y también tiene algunos micronutrientes, así como un gran contenido de proteínas en comparación con otras raíces y tubérculos. La papa contiene una cantidad moderada de hierro, pero el gran contenido de vitamina C fomenta la absorción de este mineral. Asimismo, aporta vitaminas B1, B3 y B6, y minerales como potasio, fósforo y magnesio, también folato, ácido pantoténico y riboflavina.
Ahora bien, la papa es un alimento que posee diversas ventajas y virtudes, entre ellas: su valor nutritivo, la versatilidad en sus formas de consumo, la diversidad de variedades criollas y mejoradas que se cultivan, en este rubro, cabe destacar que las principales variedades que se siembran en México para el mercado de consumo fresco son: Alpha, Atlantic, FL1867, Fianna, César, Giant y Mundial, que pertenecen al grupo de cáscara lisa y de color blanco o amarillo.
EL APUNTE
- En México, la producción de papa casi alcanza los dos millones de toneladas, siendo el estado de Sinaloa el primer productor.