Di no a la quema de parcelas
La práctica del uso del fuego en el sector agropecuario ha sido ancestral, sin embargo, representa daños en la calidad del aire, pérdida de biodiversidad y empobrecimiento de los suelos de cultivo.
MÉXICO.- De acuerdo con datos de la Comisión Nacional Forestal (Conafor) el 26.3 por ciento de los incendios forestales registrados en 2022 en el país fueron ocasionados por quemas agropecuarias y si bien esta cifra fue menor que la registrada en 2021 (40 por ciento) todavía existe un fuerte trabajo por hacer para difundir y concientizar sobre los riesgos de las quemas agropecuarias, y es lo que se propone la campaña Mi Parcela No Se Quema.
En 2022, y en coordinación con organismos públicos y privados, realizamos 30 talleres sobre alternativas al uso del fuego como uso de rastrojo, labranza mínima y diversificación de cultivos, en los que participaron mil 493 productores.
En los talleres participaron mil 493 productores de 22 entidades: Estado de México, Querétaro, Chiapas, Hidalgo, Guerrero, Puebla, Tlaxcala, Morelos, Baja California, Sonora, Ciudad de México, Veracruz, Tamaulipas, Michoacán, Yucatán, Chihuahua, Jalisco, Nayarit, Oaxaca, Durango, Nuevo León y San Luis Potosí.
Además, actualmente se impulsa un nuevo sistema de producción basado en el uso de rastrojo, labranza mínima y diversificación de cultivos.
Las quemas agropecuarias ocasionan la pérdida de nutrientes, eliminan organismos y microorganismos encargados de la descomposición de la materia orgánica, aireación del suelo y liberación de nutrientes, además de generar gases que contribuyen a la contaminación de la atmósfera y al calentamiento global.
¿Cómo puedo participar en #MiParcelaNoSeQuema?
- Asistir a capacitaciones donde se expliquen las alternativas para el manejo del rastrojo.
- Usar el rastrojo como cobertura de suelo, como alimento para el ganado, o hacer composta con él y usarlo como abono.
- Implementar un nuevo sistema de producción con base en la agricultura de conservación, que consiste en mantener una cobertura permanente en los suelos (el rastrojo es la mejor opción de cobertura), labranza mínima y diversificación de cultivos.
- Evitar la práctica de quemas agropecuarias.
- Compartir esta información con otros productores.
- Reportar las quemas agropecuarias no controladas a las autoridades del municipio y a dependencias relacionadas con el tema, como CONAFOR.
- En caso de que se pretenda llevar a cabo una quema agropecuaria, cumplir con la normativa y presentar un Aviso de Uso de Fuego a las autoridades correspondientes.
