Proyecto de cocinas en zonas rurales de México, 2° lugar en Premio William Bullock
MÉXICO.- El proyecto Cocina Colaboratorio –que reúne a comunidades de agricultores, productores, académicos, creadores y chefs– resultó el ganador del segundo lugar en el Premio “William Bullock” 2020, el cual promueve y difunde prácticas artísticas contemporáneas.
Según dio a conocer la Secretaría de Cultura federal, el segundo lugar, representado por Mariana Martínez Balvanera, recibirá un apoyo económico de 100 mil pesos y se desarrollará este año en conjunto con la Galería “Luis Nishizawa” de la Facultad de Artes y Diseño de la UNAM.
El proyecto ganador del segundo “Premio William Bullock 2020, USC Fisher Museum of Art + Patronato Fondo Arte Contemporáneo AC + Palabra de Clío AC”, se trata de un dispositivo que reúne información, saberes, conocimientos, prácticas y experiencias en torno al patrimonio biocultural de tres comunidades rurales: Loma Bonita, en la Selva Lacandona, Chiapas; Santo Domingo Tomaltepec, en Valles Centrales, Oaxaca; y San Gregorio Atlapulco, en Xochimilco, Ciudad de México.
“Cocina colaboratorio: Archivos bioculturales vivos en tres comunidades rurales, 2021-2022”, nombre completo del proyecto, busca co-crear un archivo de semillas, recetas, relatos, objetos y paisajes locales, los cuales los habitantes de dichas comunidades incorporan en su vida social como manifestación de su visión del mundo.
RESCATE DE LA MEMORIA BIOCULTURAL
Desde 2018, Cocina Colaboratorio ha reunido a comunidades de agricultores y productores, académicos, creadores y chefs para intercambiar conocimientos que concilian la restauración del paisaje, los sistemas alimentarios y un mejor sustento en comunidades rurales.
En 2020 se instauró como un proyecto transdisciplinario de acción, creación, investigación y docencia que involucra a institutos y facultades de la UNAM, profesionales y actores de la sociedad civil.
El trabajo concibe a cada comunidad como una museología, una herramienta de investigación, un dispositivo para el intercambio y la creación de redes, un lugar para la memoria y su preservación, así como una ventana para reconocer la diversidad cultural, y sobre todo para reconocer las prácticas resilientes socio-ecológicas que realizan dentro del confinamiento derivado de la crisis sanitaria por Covid-19.
A lo largo de 2021, tres dispositivos del proyecto se construirán en cada comunidad; contarán con la colaboración de habitantes, artistas e investigadores para la creación de contenido de cada comunidad relacionado a las formas, culturas y materiales locales.
