“Cooked”, un viaje delicioso a la esencia de la cocina
¿Realmente el pan es el villano que todos dicen? Son preguntas que Pollan plantea sin moralismos, pero con datos y reflexiones que invitan a cambiar nuestra relación con la comida.

MÉXICO.- Si eres de los que disfruta ver comida en pantalla pero además quieres entender su historia y su impacto en el mundo, Cooked de Michael Pollan es un festín para la mente y el estómago. Esta serie documental de Netflix, basada en su libro del mismo nombre, nos lleva a un recorrido por la evolución de la cocina a través de los cuatro elementos: fuego, agua, aire y tierra. Y sí, aunque suena a película de fantasía, lo que encontrarás aquí es pura realidad culinaria.
Cada episodio se enfoca en una técnica ancestral relacionada con uno de estos elementos, desde el asado a fuego abierto hasta la fermentación de alimentos como el queso y el pan. Lo interesante es que Pollan no se queda en lo obvio; explora la conexión entre la comida y la cultura, el poder de la industria alimentaria y cómo hemos perdido el control sobre lo que comemos. Todo con imágenes hermosas y una narración que, sin ser demasiado densa, te deja pensando en lo que metes en tu plato.
Uno de los puntos más fuertes de Cooked es su capacidad para despertar curiosidad. ¿Por qué dejamos de cocinar en casa? ¿Cómo afectan nuestros hábitos alimenticios al planeta? ¿Realmente el pan es el villano que todos dicen? Son preguntas que Pollan plantea sin moralismos, pero con datos y reflexiones que invitan a cambiar nuestra relación con la comida.
Visualmente, la serie es un placer. Desde tomas de pan inflándose en el horno hasta la transformación mágica de la leche en queso, cada cuadro está cuidadosamente filmado. Además, el ritmo es pausado, sin la prisa de otros documentales gastronómicos que solo buscan impresionar con platos extravagantes. Aquí se trata de entender, no solo de babear frente a la pantalla (aunque eso también pasa).
En definitiva, Cooked es un documental que vale la pena ver si te interesa la comida más allá de lo superficial. No es solo sobre recetas o chefs famosos, sino sobre la historia, la ciencia y la cultura de cocinar. Y lo mejor de todo: después de verlo, te dan ganas de meterte a la cocina y ensuciarte las manos. ¿Qué mejor forma de rendirle homenaje?