“Julie & Julia”, un festín de sabores, sueños y mantequilla

PUEBLA, MÉXICO.- Si eres de los que piensa que la comida puede cambiarte la vida (o al menos salvarte de un día terrible), Julie & Julia es la película que necesitas en tu plato. Dirigida por Nora Ephron, este delicioso filme de 2009 entrelaza las vidas de dos mujeres separadas por décadas pero unidas por el amor a la cocina y, claro, por la inconfundible Julia Child. Prepárate para un banquete de risas, nostalgia y recetas llenas de mantequilla.

Por un lado, tenemos a Julia Child, interpretada por la increíble Meryl Streep, quien no actúa: ¡se convierte en Julia! Su entusiasmo contagioso y su voz peculiar hacen que quieras aprender francés solo para decir “Bon appétit” como ella. La película nos muestra su vida en París en los años 50, donde decide desafiar las normas de su época y convertirse en chef profesional, con todo y su imparable energía y carisma. Si alguna vez te sentiste fuera de lugar, Julia es ese abrazo cálido que dice: “Tú puedes hacerlo, aunque el mundo piense lo contrario”.

En la otra esquina, tenemos a Julie Powell (Amy Adams), una joven escritora atrapada en un trabajo monótono en Nueva York que decide darle un giro a su vida cocinando las 524 recetas del libro de Julia Child en 365 días. ¿La parte divertida? Documenta su odisea culinaria en un blog que, para sorpresa de todos (incluida ella misma), se vuelve un fenómeno. Julie es ese personaje con el que te identificas cuando las cosas no salen bien, pero sigues adelante porque, ¿qué otra opción hay? Bueno, eso o comer más mantequilla.

Lo mágico de la película es cómo conecta estas dos historias de mujeres en búsqueda de propósito. Aunque Julia y Julie nunca se conocen (spoiler sin gravedad, lo juro), su vínculo es tan fuerte que parece que cocinan juntas. Eso sí, la película no tiene miedo de mostrar las fallas de sus protagonistas: desde colapsos emocionales hasta ollas quemadas. Pero, ¿no es eso lo que hace que las recetas y la vida sean reales?

Julie & Julia es más que una película sobre comida. Es un recordatorio de que los sueños (ya sea dominar la cocina francesa o encontrar tu lugar en el mundo) requieren paciencia, pasión y, sí, mucha mantequilla. Así que, si buscas una película para inspirarte, reírte y terminar queriendo cocinar algo con más grasa de la que pensabas, esta es tu opción. Bon appétit, cinéfilos.