Flor de izote, un exquisito obsequio de primavera
La flor o flores de izote brotan en la primavera y parte del verano, en las puntas de “palmas” o agaváceas que crecen, generalmente en el desierto.
MÉXICO.- La flor o flores de izote brotan en la primavera y parte del verano, en las puntas de “palmas” o agaváceas que crecen, generalmente en el desierto. Se trata de hermosas flores blancas o color crema, que crecen en racimos con una consistencia acerada, brillante y carnosa.
Aunque esta planta crece en el desierto o los chaparrales de México, su gran adaptabilidad la llevó a ser una planta de ornato en las grandes ciudades, por lo que es muy común encontrarla en jardineras y parques de distintas regiones del país.
Esta flor no sólo embellece los paisajes y las calles urbanas, es además un regalo a la gastronomía endémica que nos regala el periodo primaveral y parte del verano.
En algunas comunidades rurales e indígenas, la flor de izote es muy preciada por un sabor exquisito y versátil que enriquece múltiples platillos con una consistencia carnosa que los hace abundantes.
Esta planta endémica de México, es ampliamente valorada en otros países como Guatemala y El Salvador, donde ha sido reconocida por sus propiedades antiinflamatorias, así como su contenido en vitamina C, calcio, fósforo y hierro.
Las comunidades mayas, a quienes se les atribuye sus amplios conocimientos sobre la planta, también la asocian con la fertilidad, riqueza y abundancia.