Caña de azúcar, un cultivo multifacético y de gran importancia social

MÉXICO.- La caña de azúcar no es un cultivo endémico de nuestro país. Se estima que, tras el periodo de la conquista, se fueron introduciendo cultivos de otras regiones del mundo a las nuevas tierras descubiertas. Es así como esta planta llegó para conformarse como uno de los cultivos claves del desarrollo nacional.

La caña de azúcar es un cultivo que se da preferentemente en zonas tropicales en donde hay gran cantidad de humedad y disponibilidad hídrica, en México una de las principales entidades productoras de caña de azúcar es Veracruz, la cual en 2021 aportó 21,279,112 toneladas.

Un poco de historia sobre la dulce y nutritiva caña de azúcar

Es en los primeros meses del año cuando se obtiene la mayor cantidad de producción de caña de azúcar en México, esto es de gran importancia ya que de esta producción depende la generación de uno de los recursos alimentarios más importantes en todo el mundo: el azúcar.

El azúcar, que se procesa a partir de la caña, ha tenido que lidiar durante mucho tiempo con un estigma negativo, haciendo alusión a sus efectos dañinos sobre el cuerpo. Esto ha llegado a influenciar de forma determinante la imagen que tenemos de ella, pues hay quienes han generado un rechazo tajante ante cualquier presentación, sin entender que ésta también es importante y necesaria para el cuerpo humano.

El azúcar es el principal motor de donde el cuerpo extrae energía y es esencial para que los órganos puedan cumplir sus funciones. El verdadero reto es no caer en excesos.

Hemos visto ya la importancia que tiene la caña en el sector alimentario, sin embargo, este no es el único uso que se desprende de ésta.

De la caña de azúcar se procesan también sus fibras, lo que ha dado paso a la generación de papel, el cual tiene un impacto ecológico mucho menos significativo que el que implica la generación de papel a partir de árboles. Por otro lado, es importante decir que la calidad del papel que se genera por este proceso, es de alta calidad y resistencia, el cual puede ser incluso utilizado para elaborar bolsas y productos de embalaje resistentes y confiables.

Otros de los usos de la caña de azúcar es la generación de alimento para el ganado, el cual representa, según investigaciones del INIFAP, ventajas considerables: es una fuente de forraje en épocas de sequía; posee gran adaptación al medio; representa un alto rendimiento por hectárea; es resistente a plagas y enfermedades; conserva su calidad por largo tiempo; y alta digestibilidad aún en madurez.

Además de ello, la caña de azúcar es un forraje rico en carbohidratos y en fibra, aunque es pobre en proteínas y minerales, por lo que no se recomienda utilizarlo de manera regular y frecuente en la dieta de los animales.

En la industria textilera se ha indagado acerca de cómo utilizar el bagazo, un residuo que deriva del procesamiento de la caña de azúcar, para poder generar fibras textiles. En algunos lugares como Filipinas, esto es una realidad, ya que se ha encontrado la forma de aprovechar un elemento que generalmente es considerado un desperdicio, para desarrollar vestimentas, aprovechando así todas las bondades que este cultivo puede ofrecer.

También se han iniciado investigaciones de cómo la ceniza de los restos de la caña de azúcar puede ser utilizada en el ámbito de la construcción, pues al parecer ésta hace al hormigón más resistente y menos contaminante.

Aunque aún todavía falta mucho por investigar, está claro que el cultivo de la caña de azúcar es multifacético y beneficioso en muchos sentidos.

Es importante conocer y seguir explorando las posibilidades de utilización de los recursos agrícolas, para evitar el desperdicio de materias primas que pueden ser trascendentales para el desarrollo de las comunidades.