Productores de pitahaya de San José de Meza encontraron una oportunidad dentro de la dificultad
La falta de agua para continuar con la siembra de hortalizas los llevó a a experimentar con el cultivo de pitahaya
PUEBLA, MÉXICO.- Lo que parecía una desventaja para los productores de hortalizas de San José de Meza se ha convertido en una oportunidad de crecimiento, gracias a la pitahaya o “fruta del dragón”.
Y es que la falta de agua para continuar con la siembra tradicional de hortalizas llevó a unos pocos arriesgados productores a experimentar con el cultivo de pitahaya, un proyecto que, contra los pronósticos, llevó a la Cooperativa Pitahaya San José de Meza a convertirse en la pionera en la producción de este fruto en la región.
Aunque esta localidad perteneciente al municipio poblano de Tecamachalco es una zona altamente productiva, la reducción del vital líquido –debido al cambio climático y la sobreexplotación de los mantos acuíferos– ha hecho que la siembra de hortalizas ya no sea tan redituable para los pobladores.
Fue así que hace tres años Ramón Velázquez Téllez, un lugareño radicado en Estados Unidos, tuvo la iniciativa de emprender con el cultivo de la pitahaya, un fruto muy cotizado en los mercados nacionales y en el extranjero.
Si bien Puebla se ubica en los primeros lugares de producción de pitahaya a nivel nacional, son algunos municipios como Santa Clara Huitziltepec, Tehuitzingo, Caltepec, Tepeyahualco de Cuauhtémoc y Zapotitlán los que lideran la producción en el estado, de acuerdo con datos de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural.
En este estado, las regiones de Izúcar de Matamoros, La Mixteca y Tehuacán cuentan con las características climatológicas para producir la pitahaya por ser zonas áridas; pero en Tecamachalco no es así.
Con la esperanza por delante, una hectárea fue suficiente para comenzar con el proyecto que se desarrolló en estas tierras poblanas gracias a la hermana del señor Ramón, Laura Velázquez, quien junto a otros dos productores decidieron lanzarse en la siembra de esta planta.
Pese a los pronóstico desfavorables, la resistencia al clima de la llamada “fruta del dragón” y la poca agua que requieren para crecer, rindió frutos: 18 meses después de los primeros trabajos lograron cosechar 15 toneladas de pitahaya.
A la actualidad, el proyecto ya tiene 6 hectáreas e integra a 10 miembros, entre ellos los dueños de las huertas Pedro Velázquez González, Ramón Velázquez Téllez y su hermana Laura; la ingeniera Yolanda Velázquez Juárez; y el encargado de las huertas Alejandro Velázquez García.
Su trabajo favorece a cuatro familias de San José de Meza; pero a decir de los integrantes de la Cooperativa de Pitahaya, otros productores ya están interesados en continuar con la iniciativa.
Los compañeros de parcelas también sembraban hortalizas, pero por razón de la escasez del agua ya se están animando, nos están preguntando, estamos asesorándolos para que se unan a este proyecto y tengan otro tipo de ingreso, ya que estas tierras como ya no hay agua, pues están abandonadas”. (Alejandro Velázquez)
En este mes de junio se encuentran en el esplendor de su segunda cosecha, en la cual esperan recolectar entre 20 a 25 toneladas, para comercializarse no sólo en los mercados locales, sino también en otros municipios del estado e incluso en los estados de Veracruz, Morelos y Baja California Norte.
Los precios de la pitahaya oscilan entre los 35 y los 100 pesos por kilogramo, dependiendo en qué etapa de la temporada se encuentren.
Sí, innovar. Sabemos que estamos en una zona altamente agrícola de hortalizas, pero también mejorar en cuanto al precio, a veces es muy variable el precio de las hortalizas y con la pitahaya podríamos mejorar la calidad de vida de los que participan, sobre todo la parte de de los ingresos”.
A DESTACAR
miembros de la Cooperativa Pitahaya San José de Meza todos los días se esfuerzan para que la calidad de sus pitahayas llegue a los mercados internacionales, donde tendrán la oportunidad de tener mayor retribución económica por la venta, por ello están en busca de la certificación.
A futuro también planean industrializarla para darle valor agregado con la creación de otros alimentos como la mermelada, licor, ate, nieves o yogurt.
