Raíces

Cacao ceremonial, reliquia en San Francisco Coapan

Desde hace más de 300 años entregan el cacao como una ofrenda a la imagen del Santo Entierro

Magdiel Olano

PUEBLA, MÉXICO.- Para los habitantes de la comunidad de San Francisco Coapan, en el municipio poblano de San Andrés Cholula, la bebida del cacao es una reliquia sagrada.

Y es que durante la época de Cuaresma, entre los meses de marzo y abril, esta bebida pasa por una serie de rituales que le otorgan características místicas que le permiten ser una ofrenda para la figura religiosa más importante de este pueblo: la imagen del Santo Entierro.

Fotografía: Feria de la Espuma del Cacao

Desde hace más de 300 años, la comunidad decidió entregar el cacao como una ofrenda a esta imagen proveniente de la tradición católica. A partir de entonces, el cacao se consume algunos días de la Cuaresma y principalmente en Semana Santa, como explicó a LA CAMPIÑA Cristian Pérez, promotor cultural de la Feria de la Espuma del Cacao.

El producto que se consume especialmente durante el Viernes Santo lleva todo un año de preparación, pues las semillas que se usa es el “cacao ceremonial”, llamado así porque se prepara, almacena, elabora y consume de una forma distinta a la que se bebe en otros días del año.

Aunque el cacao sí se consume en estas comunidades y en la región de Cholula, este cacao es importante porque su preparación, elaboración y almacenamiento tienen que ver con rituales”.

El primero de ellos es que solamente las cacaoateras son quienes tienen permitido elaborar la bebida para la celebración, y para ello tienen que ser instruidas meses antes por una maestra cacaoatera, quien luego de enseñarles a hacerlo, en una ceremonia las “consagra” con coronas de flores, les da la bendición y las designa como mujeres aptas para la práctica.

Además, el cacao no se puede elaborar en otro espacio que no sea enfrente de un altar. Aquí se elabora desde que está en polvo, se mezcla con agua, se bate hasta formar la característica espuma, y la primera jícara que se sirve se ofrece a las imágenes religiosas que están en el altar.

Fotografía: Feria de la Espuma del Cacao

Aunado a ello, existen tres fechas específicas donde se realiza la “prueba del cacao”, previos al Viernes Santo:

  • la primera se hace en la casa de los Mayordomos, encargados de toda la celebración para fiesta grande;
  • la segunda se ofrece para los habitantes del pueblo de San Francisco Coapan;
  • la tercera se ofrece a quienes visitan la comunidad en esta importante celebración de la liturgia católica.

El momento más trascendente del festejo, posterior a la Procesión, es la “crucificción” de la imagen del Santo Entierro en Viernes Santo, protagonizada por los llamados “beatos” (jóvenes quienes meses antes se preparan física y mentalmente para la fecha sagrada).

Fotografía: Feria de la Espuma del Cacao

En ese momento se toca una melodía de banda que se guarda para este día específico del año, cuando la bebida del cacao, metafóricamente, se convierte en la sangre de Dios para alimentar a los mortales.

El momento más especial es cuando crucifican a la imagen, porque hay una pieza de banda que se toca en ese momento (…). En la Crucificción tiene sentido la reliquia, porque la semilla del cacao tiene forma de corazón (y) la bebida es como si se estuviera tomando la sangre de un Dios”.

Estos rituales tienen más de tres siglos de antigüedad entre la población, pero en este contexto desde hace 10 años se realiza la Feria de la Espuma del Cacao, un festejo que logra reunir a más de 20 mil visitantes cada año durante la Semana Santa.

Para tal magnitud de gente, más de 60 cacaoateras preparan con meses de antelación más de 2 mil kilos de polvo de cacao con el que se prepara la bebida que alimenta a todos los locales y turistas en los días previos y en especial durante la fiesta grande del Viernes Santo.

Fotografía: Feria de la Espuma del Cacao

Este 2022 volverá a celebrarse en San Francisco Coapan la Feria de la Espuma del Cacao, el Viernes Santo que este año será el viernes 15 de abril.

Ésta, forma parte de la tradición católica en la comunidad, compuesta de una procesión que se hace desde la madrugada, el viacrucis, una veneración a la imagen religiosa, la “bajada de la cruz”, entre otros servicios litúrgicos.

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