Buscan con maíz cacahuazintle reducir la pobreza en Chalchicomula de Sesma
Este maíz solamente es producido en dos lugares dentro del territorio mexicano: las faldas del Nevado de Toluca y el Citlaltepetl
PUEBLA, MÉXICO.- Por 10 años, jóvenes estudiantes de Puebla han contribuido en un proyecto que tiene una importante intención: aumentar los ingresos económicos de los habitantes de Chalchicomula de Sesma, una comunidad productora de Maíz Cacahuazintle: semilla joya para los campesinos pero subvalorada por los consumidores.
Y es que este maíz solamente es producido en dos lugares dentro del territorio mexicano: las faldas del Nevado de Toluca y el Citlaltepetl (Pico Orizaba), la montaña más alta del país ubicada entre Veracruz y Puebla, justo donde se ubica Chalchicomula de Sesma.
Denominado “Proceso productivo alternativo para el maíz cacahuazintle: una estrategia de combate a la pobreza para la comunidad de Chalchicomula de Sesma, Puebla”, el proyecto es liderado por la académica María del Carmen Morfín Herrera, y a lo largo de su desarrollo, han participado decenas de alumnos de diferentes licenciaturas de la Universidad de las Américas Puebla (Udlap).
LOS BENEFICIOS
El cacahuazintle forma parte de las 64 razas de maíz que registra la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (Conabio), cuyas características sobresalen por su sabor dulce, textura suave, consistencia harinosa y grano grande.
Esta raza es altamente nutritiva, ya que aporta proteínas, grasas, carbohidratos, calcio, fósforo, magnesio, hierro, potasio y vitaminas como A, E y B3. Al hervir, sus granos se abren por sí solos como una flor y sueltan espuma, por ello su uso primordial ha sido la elaboración del pozole, ademas de elotes, esquites, pinole o atoles.
Tal como ha explicado Morfín Herrera, dicho cereal es considerado una joya prehispánica que genera orgullo a sus productores, pues su condición exótica lo convierte en un producto de alto cultivo artesanal en la comunidad de Chalchicomula de Sesma.
Esta localidad se encuentra en el oriente de Puebla, en las estribaciones del Citlatépetl, lo cual influye en el clima de la región ya que un ambiente templado y frío, un clima ideal para la producción tradicional del maíz cacahuazintle.
EL PROYECTO
El mencionado proyecto inició en 2012, y consiste en generar propuestas socialmente responsables de animación turística, socioecológica y sociocultural que permita a los productores de la región obtener mayores ingresos económicos por la venta de su semilla.
Pues es que una de las principales dificultades para los campesinos de esta región ha sido la subvaloración económica de sus productos, pues a inicios del proyecto, en 2012, cada kilo de maíz apenas se pagaba a 3.20 pesos, tal como se explica en el sitio web del proyecto. Fue así que académicos, alumnos y miembros del pueblo en conjunto iniciaron una búsqueda para encontrar nuevas formas de posicionar el maíz cacahuazintle en el mercado local.
A lo largo de esta década, han creado diferentes alternativas de mercadeo, pero la más destacada ha sido la producción de botanas orgánicas y galletas de maíz cacahuazintle, tanto que ahora ya cuentan con una marca, un logo y una estrategia de venta.
Destaca la realización de imagen de marca de los productos de Chalchicomula de Sesma: el logo del “Dios Teo”, creado por Yasmín Mercado y María Antonia Sánchez con el apoyo de la comunidad de Chalchicomula, ya que hombres, mujeres y niños seleccionaron la imagen que quedó como logotipo para representar el proyecto.
Además, a través de donaciones se dotó a la comunidad de la infraestructura necesaria para producir de manera autónoma la nueva línea de botanas.
A finales del 2021, se había generado el acta constitutiva para registrar a la comunidad como sociedad productora de maíz de responsabilidad limitada, en la que han participado 90 estudiantes con 65 proyectos distintos.
A diez años del arranque, la colaboración continúa involucrando estudiantes de varias licenciaturas de la Universidad de las Américas Puebla (Udlap), quienes colaboran para ampliar las posibilidades de comercialización del maíz cacahuazintle en la localidad, y así beneficiar al pueblo para que tenga un mayor ingreso económico.
Ya hay esa credibilidad del grupo campesino que nos ha enseñado a vivir el otro mundo que muchos no conocen. Esto nos ha madurado de una manera diferente”, puntualizó María del Carmen Morfín.
Con información de Udlap
