Drones aliados en la modernización del campo mexicano

MÉXICO.- El uso de drones en la agricultura en otros países ha sido de gran utilidad, en nuestro país, desde hace algunos años en Michoacán, la empresa B01CO, sobrevuela y observa fincas aguacateras con el fin de revisar la salud de los árboles y asegurar la producción anual. En 2018, esta industria facturó, por concepto de exportaciones, 2,392 millones de dólares (mdd), según el Servicio de Información Agroalimentaria y Pesquera (SIAP) de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (SADER).

Los drones han servido para inspeccionar de forma más rápida, aún se trabaja en aspectos que puedan seguir innovando y mejorar su utilidad como es el caso de los investigadores de la Universidad ULB de Bruselas que en conjunto con los de la Universidad TRIER trabajan en un dron autónomo que con sus cámaras ayude a determinar las necesidades de riego, encuentre plagas o prediga el momento de cosecha.

El auge del uso de las nuevas tecnologías como la Inteligencia Artificial, permitirán a todos los involucrados en el sector agroindustrial emplear sistemas agrícolas, predecir y prevenir percances, mejorar la cadena de abasto y evitar el desperdicio de alimentos que existe en la actualidad, esto según una publicación del Stanford Graduate School of Business.

Con este tipo de tecnologías,se pretende mejorar la calidad de la producción y minimizar el impacto medioambiental, pues estos mini robots no reemplazarán a los trabajadores humanos, porque se encargarán de algunas tareas que son difíciles,  y a la vez reducirán la contaminación y los residuos.

El uso de datos en la agricultura es básico para coordinar labores de siembra y cosecha, es hasta 2010 cuando hay un avance en la ciencia de datos para el desarrollo de mejores prácticas agrícolas, además se cuenta con cifras sobre el monitoreo de la producción en la cadena de alimentos para poder controlar tanto la cantidad como la calidad de la producción agrícola.

La agricultura sigue siendo una actividad en la que factores como el tipo de suelo, la lluvia, las semillas a emplear y la disponibilidad de herramientas, tractores y cosechadoras son preponderantes para el éxito de la cosecha, sin mencionar las plagas, sequías, inundaciones y otro tipo de fenómenos naturales.

Otro factor importante es el sistema de comercio bajo el que funciona la agricultura, pues el contrato siempre avala una cantidad de producto a entregar y al final del ciclo de la cosecha puede no alcanzarse.

Agribotix Latam provee tecnología a los agroindustriales mexicanos, que buscan tener más información sobre el estado de sus parcelas. Esta empresa estadounidense, comenzó a experimentar en 2013 con la interpretación de imágenes obtenidas por medio de drones. Es decir ellos captan imágenes con una resolución de hasta dos centímetros por pixel, superiores a las imágenes satelitales cuya definición puede ser, en el mejor de los casos, de 50 centímetros por pixel.

Los drones empleados por la empresa B01CO son similares a los usados para fines recreativos, como los de la marca DJI, una de las más populares. Sin embargo, llevan a bordo cámaras infrarrojas para acceder a detalles que de otro modo serían desconocidos, dice Luis Eduardo Quezada, director en B01CO, cuya sede está en la localidad aguacatera de Uruapan, Michoacán.

Con la información obtenida se considera el uso de fertilizantes, plaguicidas o el riego de los cultivos. Además de notificar sobre el estado de una parcela, la tecnología también permite un control más detallado de los materiales requeridos en la labor agrícola.

Una barrera para incluir los drones en los campos agrícolas mexicanos es su alto costo, por ello para resolver este obstáculo, Luis Eduardo Quezada y su equipo en B01CO ofrecen vigilancia aérea como si fuese la renta de un servicio. “Nuestro precio base de supervisión con un dron es de 309 pesos por hectárea, lo que nos permite ofrecer al agricultor indicadores de precipitación, temperatura, bitácora de observaciones y un reporte detallado por uno de nuestros ingenieros agrónomos”.

En el caso de las parcelas de aguacate, el análisis se realiza casi cinco veces al año, lo que permite al agricultor un preciso control de su cosecha en intervalos que antes se pensaban imposibles. Aunque lo más importante será conocer estas causas para tomar medidas y mejorar la productividad en el futuro. Este es el verdadero objetivo de la introducción de los drones.