Maíces nativos, clave para erradicar el hambre y mejorar la nutrición
MÉXICO.- La Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader) y el Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo (CIMMYT) desarrollaron, en una estrategia conjunta, 158 ensayos y viveros de maíz nativo y de cultivos de la milpa en Oaxaca, Michoacán y el estado de México.
En un comunicado, la Sader indicó que esta estrategia tiene como objetivo consolidar un esquema que eleve la productividad (de maíz) sustentable y el bienestar de las comunidades milperas, con el fin de erradicar el hambre y mejorar la nutrición.
Explicó que con esta iniciativa conjunta, a través del Programa MasAgro, se busca revitalizar la milpa y ampliar la investigación y el consumo de maíces nativos, al representar éstos un potencial productivo que contribuirá a que la población mexicana tenga acceso a una alimentación sana, nutritiva y suficiente.
La Sader indicó que a través del citado programa se determinó que en el sistema milpa y los maíces, podría haber importantes elementos para desarrollar variedades resistentes a las enfermedades, la sequía y otras condiciones extremas derivadas del cambio climático.
Sobre todo, afirmó, porque crece el interés por los maíces de colores en varios nichos del mercado, que demandan productos nutritivos de alta calidad producidos artesanalmente, con inocuidad y bajo impacto ambiental.
Agregó que la Península de Yucatán el CIMMYT y su red de colaboradores afianzaron acciones que han sido reconocidas por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) como una de las soluciones más innovadoras para fomentar el desarrollo de las comunidades rurales y los grupos indígenas.
En el país, abundó, los maíces nativos se adaptaron a las más diversas condiciones geográficas y a distintos usos, por lo que podría haber importantes pistas para desarrollar variedades resistentes.