Crean en Puebla un centro se producción de hongos comestibles y medicinales
PUEBLA, MÉXICO.- Incrementar el consumo de hongos entre la población mexicana, es de los principales objetivos del recién inaugurado Centro de Biotecnología de Hongos Comestibles, Funcionales y Medicinales (HCFM), un laboratorio especializado en el Reino Fungi, que busca producir hasta 120 toneladas de hongos al año.
Impulsado desde el Colegio de Postgraduados campus Puebla, la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader), y el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (CONACYT), será uno de los diez centros de este tipo que se tienen a nivel mundial, y beneficiará directamente a más de 6 mil productores, campesinos e indígenas de la región centro del país, principalmente esta entidad.
En entrevista con LA CAMPIÑA, Daniel Martínez Carrera, investigador del Colpos Puebla y responsable del proyecto, señaló que se invirtieron al menos 115 millones de pesos en el Centro que ya comenzó a funcionar, el cual cultivará hasta 20 variedades de hongos.
En el centro se producirán semillas y unidades de producción para que después los campesinos puedan llevarlas y reproducirlas en sus regiones para autoconsumo o venta, Además de que ofrecerán talleres de capacitación.
Su instalación, agregó, es una importante acción estratégica que contribuye a superar dos de los grandes retos del siglo XXI: la alimentación sustentable, toda vez que los HCFM tienen propiedades benéficas para la salud; y generar fuentes de energía renovable al tener un potencial de ser biocombustibles.
Los champiñones blancos, cafés y orgánicos (Agaricus), así como las setas (blanca, gris, café; Pleurotus), el huitlacoche (Ustilago), y el shiitake (Lentinula), son las principales variedades que se estarán trabajando en el centro de biotecnología.
HONGO, ALIMENTO PREHISPÁNICO
El especialista indicó que los hongos comestibles son un alimento tradicional de origen microbiano consumido en México desde épocas prehispánicas, que constituyen una alternativa de alimentación, por lo que buscarán incrementar su producción y consumo entre la población del país.
La producción nacional en 2019 superó las 63 mil toneladas de hongos comestibles frescos, las cuales fueron producidas por más de 6 mil pequeños
productores, emprendedores y empresas privadas; la intención es lograr que en un plazo de 5 años se duplique esta cantidad para llegar a los 120 toneladas de hongos al año.
El abasto nacional de la semilla —sobre todo en los estados de Puebla, México, Oaxaca, Morelos, Guanajuato, Guerrero, Hidalgo, Jalisco, Michoacán, Morelos, Oaxaca, Querétaro, y Tlaxcala—, incidirá en su consumo que pretende elevarse de los 620 gramos que come una persona al año, a los 1.2kg de consumo de hongo per cápita anual.
La demanda actual de semilla de hongos comestibles en el país es de 6,240 ton/año (17 ton/día), con un valor de 235 millones de pesos anuales. La mayor parte de la semilla se importa, equivalente a más de 228.4 millones de pesos anuales.
PROYECTO A FAVOR DEL MEDIO AMBIENTE
Martínez Carrera enfatizó que el impacto que tendrá el Centro el nuestro país se extiende un beneficio ambiental importante, porque para producir las 63 mil toneladas de hongos comestibles que actualmente se tienen, se utilizan más de 500 mil toneladas de subproductos agrícolas, agroindustriales y forestales, las cuales son recicladas como substrato de cultivo.
Además, explica que los hongos tienen una gran capacidad degradadora de la materia orgánica, por lo que también serán parte de un proceso de reciclaje de nitrógeno, fósforo y potasio a través de la biodegradación.
“Esto significa que también se duplicará el bioreciclaje de estos subproductos que actualmente poco se utilizan en nuestro país y que a través de estas biotecnologías pueden ser utilizadas (…) en un mediano plazo pasar a un millón de toneladas métricas bio recicladas por año”.
El investigador del campo señaló que el Centro de Biotecnología de Hongos Comestibles, Funcionales y Medicinales tendrá una repercusión directa tanto social como económica y ecológica no solamente en el estado de Puebla, sino en todo el país.
