Sanidad animal en México, una historia llena de éxitos
MÉXICO.- La historia de la de sanidad animal en México se remontan a la época de la Conquista, cuando Juan Suárez de Peralta (1538-1613), escribió el libro “Tratado de albeitería” en 1580, en donde se describían los animales y tipos de enfermedades atendidas por los “albéitares”, oficio de los encargados de atender las enfermedades, herrado, reproducción y cuidados en general del caballo y “otras bestias”.
Hacia finales del siglo XIX, el campo mexicano inició un proceso de transformación, con nuevas formas de producción, una mayor diversificación y explotación de las actividades ganaderas lo que incrementó el riesgo de introducción de plagas y enfermedades ausentes en el campo mexicano, poniendo de manifiesto la relevancia de la sanidad animal y la importancia del desarrollo de instituciones académicas y científicas, las cuales sentaron las bases para la creación de las primeras dependencias oficiales enfocadas al control y combate de enfermedades y plagas.
Con el paso del tiempo se fijaron las bases a las que se sujetaría la inspección sanitaria y veterinaria de los animales y subproductos de importación y exportación; se establece el fundamento legal que rige la actividad: Ley Federal de Sanidad Animal, asimismo, se reglamentan y fortalecen los servicios de inspección con la profesionalización del personal. Actualmente es el SENASICA, a través de la Dirección General de Salud Animal, el encargado de dar respuesta a los retos sanitarios.
Dentro de las experiencias exitosas de la sanidad animal en México, encontramos: la erradicación, en 1954, de la fiebre aftosa, status que se mantiene hasta hoy, en 1991 se confirma que México se encuentra libre del gusano barrenador del ganado gracias a la técnica de la mosca estéril, la erradicación de la fiebre porcina clásica (2012) lo que ha permitido un importante y progresivo incremento en las exportaciones de productos cárnicos de cerdo a países tan lejanos como Japón, China y Corea.
En la actualidad México es reconocido por la Organización Mundial de Salud Animal (OIE) como uno de los cinco países libres de las seis enfermedades animales más devastadoras: fiebre aftosa, peste equina, peste de los pequeños rumiantes, fiebre porcina clásica, perineumonía contagiosa bovina y encefalopatía espongiforme bovina. Se ha auto declarado libre ante la OIE -proporcionando las evidencias del cumplimiento de las directrices de los Código Sanitario para los animales terrestres- de durina, muermo, miasis, pulorosis y tifosis aviar en las aves de corral y peste porcina africana.
México goza de un estatus privilegiado con lo que puede ofrecer mayores garantías sobre los alimentos sanos e inocuos a consumidores nacionales y extranjeros, al mismo tiempo que le permite exportar productos agroalimentarios a 160 países del mundo y acceder a cada vez más mercados.
El que nuestro país cuente con una condición zoosanitaria adecuada, se lo debemos a todos los hombres y mujeres que a pesar de la pandemia trabajan diariamente para asegurar la producción y el abasto de alimentos sanos para la población.