Precios del maíz a nivel mundial podrían haber llegado a su nivel más alto
Desde el 12 de enero de este año, el maíz a plazo de julio que cotiza en Chicago ha subido casi 10%, es decir, 13.39 dólares por tonelada para cerrar el viernes pasado en niveles de 156.19 dólares; sin embargo, las últimas dos sesiones de la semana lo vimos bajar fuerte, particularmente el viernes, lo que ha dejado a más de un participante con la duda sobre si el maíz ya habrá tocado niveles máximos, o si aún tiene espacio para subir más, escribe Alfonso García Araneda, en su columna para El Economista.
Lo que llama más la atención es que el jueves pasado, el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA, por su sigla en inglés) emitió su reporte sobre oferta y demanda al mes de mayo, el cual ya incluye las predicciones sobre el ciclo que se está aún sembrando, el 2018-19, y la verdad sea dicha, los números que mostró no son bajistas, y sin embargo, los precios reaccionaron a la baja jueves y viernes.
El reporte del USDA sobre maíz a nivel mundial redujo los estimados de oferta entre el ciclo actual y el 2017-18 en 13.27 millones de toneladas mientras que al consumo lo incrementó en 22.43 millones, dejando así una expectativa de Inventarios finales para el ciclo 2018-19 de 159.15 millones de toneladas, es decir, 35.7 millones de toneladas menos que el ciclo anterior y 21.65 millones por debajo de lo que esperaba el mercado, lo cual no es bajista.
Por su parte, a nivel de los Estados Unidos, el USDA no le movió nada al ciclo 2017-18, pero sí estimo una producción menor para este ciclo de 14.33 millones de toneladas para quedar en 356.63 millones, como consecuencia de una reducción en la superficie a cosechar estimada en 810,000 hectáreas y un rendimiento de 10.92 tons/ha versus las 11.09 del ciclo anterior, quedando así una oferta total proyectada de 413.33 millones de toneladas.
Por el lado del consumo, el USDA lo redujo en 4.45 millones de toneladas al sacar las tijeras en los estimados de uso para forrajero, y exportaciones, aunque estimó que se consumirán 1.27 millones de toneladas más para la producción de etanol, quedando así el consumo total en 370.60 millones de toneladas y los Inventarios finales en 42.72 millones, es decir, 12.70 millones menos que el ciclo anterior, pero por encima de los 41.15 que esperaba el consenso del mercado.
Entre los factores que han influido para las alzas que ha tenido el maíz se encuentran los problemas climatológicos que se han presentado en Sudamérica, como les hemos venido informando en este espacio, por lo que el USDA estimó la producción de maíz en Argentina en 33 millones de toneladas, sin cambios con respecto al mes anterior, mientras que en Brasil sí redujo su expectativa al ubicarla en 87 millones contra los 92 millones del mes anterior y los 88.2 que esperaba el mercado.
A lo anterior se suman los retrasos en las siembras de Estados Unidos que al lunes pasado se llevaba 39% de la superficie sembrada contra 44% en promedio de los últimos cinco años, lo que ha venido a meter presión adicional; sin embargo, les recuerdo que con cualquier ventana de oportunidad en el clima, los agricultores norteamericanos tienen fuertes avances. Habrá que ver qué nos informa el USDA hoy sobre los avances de siembra.
Con lo anterior parecería que el maíz aún tiene espacio para subir, y quizá lo haga en el corto plazo; sin embargo, este ciclo apenas comienza, las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China pueden convertirse en un factor bajista en cualquier momento, así como también la fortaleza del dólar que puede repercutir en el ritmo de exportaciones.
Para marzo del 2019, que es el plazo que usan nuestros productores del ciclo primavera-verano para tomar coberturas, el precio se ubica en 166.73 dólares/tonelada, lo cual resulta sumamente atractivo si se considera que el USDA estima que los precios del maíz pagados a los agricultores en el ciclo 2018-19 se ubicarán entre los 129.88 y los 169.25 dólares/tonelada.